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Te explicamos todo lo que debes saber sobre el vino rosado

¿Cómo se elabora el vino rosado?

Son tres las formas de producir vino rosado:

Contacto con los hollejos

Consiste en aplastar las uvas de hollejo tinto, y dejando que quede en contacto con el mosto poco tiempo. Después se prensan las uvas, y se retiran los hollejos, cosa que hace que el sabor del vino, sea más parecido al blanco. Cuanto más se dejen los hollejos, más intenso será el color.

Sangrado

Para tener más taninos y color más tinto, se retira parte del zumo rosa en una etapa temprana. El vino que queda en la cuba se intensifica al reducirse el volumen total, y el mosto de la maceración se concentra. El zumo rosa que sangre puede fermentarse separadamente para producir el rosado.

Mezcla

Es muy infrecuente y desaconsejable; pero se trata de mezclar vino tinto y blanco.

¿Con qué tipo de comida podemos servir un vino rosado?

Dado que el frescor es la principal cualidad de las ensaladas, el vino rosado da el equilibrio perfecto.

Para la pasta, hay que tener siempre en cuenta la salsa. Una salsa marinera, de marisco por ejemplo, acompaña a la perfección un rosado seco y ligero.

El rosado joven de uva tempranillo es un gran acompañante del marisco, los pescados blancos y el sushi.

A la hora del postre, el rosado siempre funciona. ¿Hemos dicho postre? Por supuesto que sí. Un rosado ácido incrementa el contraste con el sabor dulce del postre.

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